lunes, 30 de septiembre de 2013

Franciscans International denuncia política minera de Colombia ante la ONU

Durante la 24° Sesión del Consejo de Derechos Humanos  de la Organización de Naciones Unidas, (ONU) celebrado el pasado 19 de septiembre en Ginebra (Suiza), la ONG de la familia franciscana, Franciscans International, llevó al pleno la situación de muchos parajes naturales y focos de población colombianos amenzados por la política minera del país.


Colombia es uno de los países con más biodiversidad en el mundo y alberga a más del 10% de las especies de plantas y animales mundiales. Pero hoy día, el 40% del territorio colombiano está concesionado o solicitado por empresas multinacionales para realizar proyectos de extracción de minerales e hidrocarburos, lo cual refleja la intención del Gobierno colombiano de convertir el país en una potencia minera y que tiene consecuencias significativas para el ecosistema y las comunidades rurales. Con el objetivo de estimular el desarrollo del sector minero el Gobierno ha promovido cambios normativos que han abierto camino para la intensificación de la explotación minera ya que  declaró la minería como una «actividad de utilidad pública y de interés social», lo que permite la expropiación unilateral de bienes. También declaró la lucha contra la minería «ilegal» y concedió títulos mineros en zonas protegidas como páramos, resguardos indígenas y territorios colectivos afrodescendientes.
En este vídeo (minuto 56, capítulo 23) puede verse el momento de la sesión en el que se planteó la denuncia, planteando el caso del Páramo de Santurbán.(click aquí)
Franciscans International (http://www.franciscansinternational.org) es una Organización no gubernamental reconocida con estatus consultivo general en las Naciones Unidas. Actúa bajo el patrocinio de la Conferencia de la Familia Franciscana (CFF) y sirve a la Comunidad Mundial a través del desarrollo de los principios y de los valores franciscanos, espirituales y éticos ante las diversas instancias y los respectivos Órdenes del Día de las naciones Unidas.

Exposed 2013: Vigilias contra la Corrupción

Del 14 al 20 de Octubre, cristianos de todo el mundo participaran en el acto público de acción y oración, encendiendo la luz sobre la corrupción. Esta niciativa internancional y ecuménica se enmarcará dentro de las acciones internacionales que se están desarrollando en la Campaña para erradicar la Pobreza (Alianza Española contra la Pobreza).



Se trata de una gran oportunidad para que las organizaciones cristianas ofrezcamos un TESTIMONIO común ante la sociedad, en torno a la corrupción y a la pobreza, en los tiempos de crisis que padece nuestra sociedad. Sumarse a la iniciativa es fácil ya que desde la siguiente web puede descargarse todo tipo de materiales: Click aquí

En la misma web puedes encontrar mucha más información, apoyar la iniciativa y compartirla en las redes sociales: http://www.exposed2013.com

Ojalá sean muchas las comunidades, parroquias y movimientos que se sumen a los millones de personas que ya gritan en todo el mundo contra la corrupción y por los valores de la JPIC.

En Madrid, la Comisión Diocesana de Justicia y Paz ha organizado una reunión en su sede (Calle Rafael del Riego, 16 - 3º Dcha) el próximo martes 1 de octubre, a las 19:00 horas para compartir la iniciativa y programar posibles acciones.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Apunta en tu agenda: Miércoles 16 de octubre CONTRA LA RIQUEZA QUE EMPOBRECE

En el marco de la Semana de la lucha contra la Pobreza, que este año tendrá por lema “CONTRA LA RIQUEZA QUE EMPOBRECE, ACTÚA”, la Red de Entidades para el Desarrollo Solidario (REDES) -http://www.redes-ongd.org- está organizando una actividad para la difusión de su campaña "ÁFRICA, CUESTIÓN DE VIDA, CUESTIÓN DEBIDA" (ver web

La cita será el miércoles 16 de octubre a las 7 de la tarde en la Universidad Pontificia de Comillas. En el acto participará un representante de la campaña que explicará qué se ha hecho y, sobre todo, qué se va a hacer para concienciar sobre el expolio. A continuación intervendrá Jesús García Luengos, autor de un estudio sobre la situación en Sudán del Sur y del actual estudio sobre el expolio, para contextualizar este tema tan complejo. Finalmente, se contará con el testimonio de un hermano africano, un religioso congoleño que hablará en primera persona sobre el impacto real del expolio en las comunidades.

Pronto esperamos ofreceros más información Por ahora esto es sólo un recordatorio, para que lo apuntéis en las agendas. Miércoles 16 de octubre: CONTRA LA RIQUEZA QUE EMPOBRECE


sábado, 7 de septiembre de 2013

Alfabetizaciones para el siglo XXI

La alfabetización es un derecho y, a la vez, el cimiento del aprendizaje a lo largo de toda la vida, la base para mejorar el bienestar y los medios de subsistencia. Por esos motivos la alfabetización es un motor del desarrollo sostenible e integrador.
Desde hace más de 40 años, la UNESCO viene celebrando el 8 de septiembre el Día Internacional de la Alfabetización, en el que recuerda a la comunidad mundial que la alfabetización es un derecho humano y constituye el principio de todo aprendizaje.
El Día Internacional de la Alfabetización de este año estará dedicado a “las modalidades de alfabetización del siglo XXI”, con miras a poner de relieve la necesidad de alcanzar “las competencias básicas de alfabetización para todos” y dotar a cada persona de las más avanzadas aptitudes de lectoescritura y cálculo, como parte del aprendizaje a lo largo de toda la vida.
Mientras las personas acceden a las sociedades de la información y de conocimiento y la tecnología avanza a velocidades impensables, UNICEF advierte que 1000 millones de personas aún en pleno siglo XXI no podrán leer un libro, ni escribir su nombre. 


La verdadera paz nace del corazón del ser humano reconciliado con Diosy con sus hermanos...

Cien mil personas han acudido a la Plaza de San Pedro respondiendo al llamamiento lanzado por el Papa Francisco en el Ángelus del pasado domingo cuando convocó para el 7 de septiembre una jornada de ayuno y oración por la paz en Siria, en Oriente Medio y en todo el mundo a la luz de las circunstancias dramáticas que atraviesa Siria. Desde ese día han llovido las adhesiones a una iniciativa que ha sido aplaudida no sólo por los católicos sino por las otras confesiones cristianas, por los pertenecientes a otras religiones, desde budistas a judíos y musulmanes y también por aquellos que no pertenecen a religión alguna. Se han movilizado parroquias y asociaciones, Caritas y la Comunidad de San Egidio, grupos de oración y órdenes religiosas como las Carmelitas descalzas de Tierra Santa; alcaldes y presidentes de autonomías regionales, organizaciones por la paz, la cooperación y el desarrollo, sindicatos, etc... Al llamamiento se ha adherido una larga lista de personalidades como el arquitecto italiano Renzo Piano, el presidente del Parlamento Europeo Martin Schulz o el Gran Mufti de Siria, lider espiritual de los sunís que esta tarde en Damasco ha invocado la paz en la mezquita de los Omeyas con los jefes religiosos de su nación. En las iglesias católicas de todo el mundo, desde Australia hasta Egipto, se ha elevado esta tarde una oración por la paz.



Ya desde esta mañana la Plaza estaba abarrotada de personas; entre ellas eran numerosas las que querían confesar, a partir de las 17,45 con alguno de los 50 sacerdotes instalados en el Brazo de Constantino y bajo las columnatas, porque Francisco quería que en esta jornada estuvieran presentes los confesores porque, “la verdadera paz nace del corazón del ser humano reconciliado con Dios y con sus hermanos”. A las 18,30 se han vuelto a leer las palabras que el Papa pronunció el pasado domingo como introducción de la Vigilia que ha comenzado a las 19 con el saludo del pontífice y el canto del “Veni Creator”, al que ha seguido la entronización de la imagen de la Virgen como “Salus Populi Romani”, llevada por cuatro Guardias Suizos.

El Papa ha comenzado entonces el rezo del Rosario; cada misterio iba acompañado por la lectura de una poesía de Santa Teresita del Niño Jesús y al final se invocaba a María: “Reina de la Paz, ruega por nosotros. Finalizado el rezo del rosario, el Santo Padre ha pronunciado la siguiente homilía:

Y vio Dios que era bueno”.El relato bíblico de los orígenes del mundo y de la humanidad nos dice que Dios mira la creación, casi como contemplándola, y dice una y otra vez: Es buena. Nos introduce así en el corazón de Dios y, de su interior, recibimos este mensaje. Podemos preguntarnos: ¿Qué significado tienen estas palabras? ¿Qué nos dicen a ti, a mí, a todos nosotros?”

Nos dicen simplemente que nuestro mundo, en el corazón y en la mente de Dios, es “casa de armonía y de paz” y un lugar en el que todos pueden encontrar su puesto y sentirse “en casa”, porque “es bueno”. Toda la creación forma un conjunto armonioso, bueno, pero sobre todo los seres humanos, hechos a imagen y semejanza de Dios, forman una sola familia, en la que las relaciones están marcadas por una fraternidad real y no sólo de palabra: el otro y la otra son el hermano y la hermana que hemos de amar, y la relación con Dios, que es amor, fidelidad, bondad, se refleja en todas las relaciones humanas y confiere armonía a toda la creación. El mundo de Dios es un mundo en el que todos se sienten responsables de todos, del bien de todos. Esta noche, en la reflexión, con el ayuno, en la oración, cada uno de nosotros, todos, pensemos en lo más profundo de nosotros mismos: ¿No es ése el mundo que yo deseo? ¿No es ése el mundo que todos llevamos dentro del corazón? El mundo que queremos ¿no es un mundo de armonía y de paz, dentro de nosotros mismos, en la relación con los demás, en las familias, en las ciudades, en y entre las naciones? Y la verdadera libertad para elegir el camino a seguir en este mundo ¿no es precisamente aquella que está orientada al bien de todos y guiada por el amor?”

Pero preguntémonos ahora: ¿Es ése el mundo en el que vivimos? La creación conserva su belleza que nos llena de estupor, sigue siendo una obra buena. Pero también hay “violencia, división, rivalidad, guerra”. Esto se produce cuando el hombre, vértice de la creación, pierde de vista el horizonte de belleza y de bondad, y se cierra en su propio egoísmo”.

Cuando el hombre piensa sólo en sí mismo, en sus propios intereses y se pone en el centro, cuando se deja fascinar por los ídolos del dominio y del poder, cuando se pone en el lugar de Dios, entonces altera todas las relaciones, arruina todo; y abre la puerta a la violencia, a la indiferencia, al enfrentamiento. Eso es exactamente lo que quiere hacernos comprender el pasaje del Génesis en el que se narra el pecado del ser humano: El hombre entra en conflicto consigo mismo, se da cuenta de que está desnudo y se esconde porque tiene miedo tiene miedo de la mirada de Dios; acusa a la mujer, que es carne de su carne; rompe la armonía con la creación, llega incluso a levantar la mano contra el hermano para matarlo. ¿Podemos decir que de la “armonía” se pasa a la “desarmonía”? No, no existe la “desarmonía”: o hay armonía o se cae en el caos, donde hay violencia, rivalidad, enfrentamiento, miedo”.

Precisamente en medio de este caos, Dios pregunta a la conciencia del hombre: “¿Dónde está Abel, tu hermano?”. Y Caín responde: “No sé, ¿soy yo el guardián de mi hermano?” Esta pregunta se dirige también a nosotros, y también a nosotros nos hará bien preguntarnos: ¿Soy yo el guardián de mi hermano? Sí, tú eres el guardián de tu hermano. Ser persona humana significa ser guardianes los unos de los otros. Sin embargo, cuando se pierde la armonía, se produce una metamorfosis: el hermano que deberíamos proteger y amar se convierte en el adversario a combatir, suprimir. ¡Cuánta violencia se genera en ese momento, cuántos conflictos, cuántas guerras han jalonado nuestra historia! Basta ver el sufrimiento de tantos hermanos y hermanas. No se trata de algo coyuntural, sino que es verdad: en cada agresión y en cada guerra hacemos renacer a Caín. ¡Todos nosotros! Y también hoy prolongamos esta historia de enfrentamiento entre hermanos, también hoy levantamos la mano contra quien es nuestro hermano. También hoy nos dejamos llevar por los ídolos, por el egoísmo, por nuestros intereses; y esta actitud va a más: hemos perfeccionado nuestras armas, nuestra conciencia se ha adormecido, hemos hecho más sutiles nuestras razones para justificarnos. Como si fuese algo normal, seguimos sembrando destrucción, dolor, muerte. La violencia, la guerra traen sólo muerte, hablan de muerte. La violencia y la guerra utilizan el lenguaje de la muerte”.

"Tras el caos del Diluvio, dejó de llover, apareció el arcoiris y la paloma trajo un ramo de olivo. Pienso también hoy en aquel olivo que los representantes de las diferentes religiones plantamos en Buenos Aires, en la Plaza de Mayo, en el año 2000, pidiendo que no haya más caos, pidiendo que no haya más guerra, pidiendo paz".

En estas circunstancias, me pregunto: ¿Es posible seguir el camino de la paz? ¿Podemos salir de esta espiral de dolor y de muerte? ¿Podemos aprender de nuevo a caminar por las sendas de la paz? Invocando la ayuda de Dios, bajo la mirada materna de la Salus populi romani, Reina de la paz, quiero responder: Sí, es posible para todos. Esta noche me gustaría que desde todas las partes de la tierra gritásemos: Sí, es posible para todos. Más aún, quisiera que cada uno de nosotros, desde el más pequeño hasta el más grande, incluidos aquellos que están llamados a gobernar las naciones, dijese: Sí, queremos. Mi fe cristiana me lleva a mirar a la Cruz. ¡Cómo quisiera que por un momento todos los hombres y las mujeres de buena voluntad mirasen la Cruz! Allí se puede leer la respuesta de Dios: allí, a la violencia no se ha respondido con violencia, a la muerte no se ha respondido con el lenguaje de la muerte. En el silencio de la Cruz calla el fragor de las armas y habla el lenguaje de la reconciliación, del perdón, del diálogo, de la paz. Quisiera pedir al Señor, esta noche, que nosotros cristianos, los hermanos de las otras religiones, todos los hombres y mujeres de buena voluntad gritasen con fuerza: ¡La violencia y la guerra nunca son camino para la paz! Que cada uno mire dentro de su propia conciencia y escuche la palabra que dice: Sal de tus intereses que atrofian tu corazón, supera la indiferencia hacia el otro que hace insensible tu corazón, vence tus razones de muerte y ábrete al diálogo, a la reconciliación; mira el dolor de tu hermano y no añadas más dolor, detén tu mano, reconstruye la armonía que se ha perdido; y esto no con la confrontación, sino con el encuentro. ¡Que se acabe el sonido de las armas! La guerra significa siempre el fracaso de la paz, es siempre una derrota para la humanidad. Resuenen una vez más las palabras de Pablo VI: “Nunca más los unos contra los otros; jamás, nunca más ¡Nunca más la guerra! ¡Nunca más la guerra!”.”La Paz se afianza solamente con la paz; la paz no separada de los deberes de la justicia, sino alimentada por el propio sacrificio, por la clemencia, por la misericordia, por la caridad”. Perdón, diálogo, reconciliación son las palabras de la paz: en la amada nación siria, en Oriente Medio, en todo el mundo. Recemos por la reconciliación y por la paz, contribuyamos a la reconciliación y a la paz, y convirtámonos todos, en cualquier lugar donde nos encontremos, en hombres y mujeres de reconciliación y de paz. Amén”.

Finalizada la meditación del Pontífice, se ha guardado silencio mientras se preparaba el altar para la exposición del Santísimo. Durante la adoración se ha leído una lectura bíblica sobre el tema de la paz, seguida de la oración de un Papa sobre ese mismo argumento,y de una invocación responsorial para pedirla. Al final de cada uno de estos momentos, cinco parejas de personas (en representación de Siria, Egipto, Tierra Santa, Estados Unidos y Rusia) ofrecían incienso en el incensario a la derecha del altar. La oferta iba acompañada de una serie de invocaciones cuyo tema común era la paz, entre ellas “Señor que amas la vida lleva a la paz allí donde se decide la suerte de las naciones” y “Rompe con tu potencia creadora cualquier violencia contra la vida humana”.

A la adoración han seguido las lecturas, “en la forma más larga prevista para una celebración de vigilia”; se ha leído el capítulo 20 del Evangelio de San Juan. Después, alrededor de las 22,15 ha habido, hasta las 22,40, un tiempo prolongado de silencio para la oración personal.

La ceremonia, verdadera y propia, ha concluido con la bendición eucarística que Francisco ha impartido a los presentes. Y hoy, el Papa ha escrito a los 9 millones de personas que siguen su cuenta de tweet: “Rezad por la paz”.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Jornada de ayuno y oración por la Paz en Siria

Dios de misericordia, escucha el clamor del pueblo sirio, conforta a los que sufren a causa de la violencia, consuela a los que lloran a sus difuntos, convierte los corazones de los que han tomado las armas, protege a los que se han comprometido con la paz. Dios de la esperanza, inspira a los líderes para que escojan la paz en lugar de la violencia y busquen la reconciliación con sus enemigos.